Si tienes una pizzería o un restaurante italiano y usas un horno de cinta sabrás de sus ventajas a la hora de cocinar un producto de manera rápida, fácil y segura. Esto se debe a su versatilidad a la hora de poder regular temperaturas y por consiguiente la cocción de los alimentos, gracias, sobretodo, a la capacidad de regular la velocidad de la cinta transportadora.
Debido a que el diseño del horno de cinta es muy compacto, en ocasiones es muy laboriosa su limpieza, por esta razón os proponemos 5 consejos para intentar mantener correctamente los hornos de cinta.
1.- Usar un cepillo fino pero resistente para limpiar la cinta transportadora cuando esté en movimiento dejando que los restos de comida caigan en las bandejas laterales.
2.- Limpiar y fregar diariamente (cuando haya acabado el servicio) con bactericida las bandejas laterales donde se depositan los restos de comida. Importante no usar limpiadores y estropajos abarsivos y mucho menos espátulas a no ser que sea imprescindible.
3.- Unos 20 o 30 minutos después del apagado del horno, encender sólo la cinta a velocidad media y limpiar con bayeta seca.
4.- Limpiar el exterior del horno con bayeta húmeda y con bactericida
5.- Una vez al mes desmontar la cinta transportadora y aspirar en interior del horno teniendo en cuenta que debe de estar frío y apagado. Y también limpiar la cinta transportadora con una bayeta un poco húmeda y con bactericida. Siempre teniendo el máximo cuidado posible.
Y nada más intenta seguir estos pequeños consejos y tu horno de cinta tendrá una vida mucho más larga.
Hasta el próximo post.